La Poinsentia

Es una de las protagonistas del invierno  y posee muchos nombres, Poinsentia, estrella de navidad, flor de navidad… Su nombre científico es Euphorbia pulcherrima, y aunque está muy extendida en nuestro país es una planta originaria de México. En su hábitat natural se convierte en un arbusto.

 

En 1828 , un embajador estadounidense en México, descubrió la planta y la introdujo en Estados Unidos, su nombre es J.R.Poinsett. Aunque sería en los años 50 del siglo pasado cuando entró en Europa.

 

También es conocida por atraer a la buena suerte, se dice  que la planta tiene la capacidad de activar y animar a lo que le rodea.

 

Si os la lleváis  a vuestro hogar aquí tenéis algunos consejos:

Cuidados:

En nuestro clima, la planta tiene que estar en el interior, en un lugar con bastante luminosidad, ya que si le falta luz las hojas se empezarán a caer. No debe estar expuesta a corrientes de aire y hay que alejarla de de radiadores, televisores, ordenadores…ya que la humedad ambiental alta es fatal para ella (si necesitas poner la calefacción pulverizas las hojas)

Riego. Hay que mantener el sustrato húmedo, evitando que se seque del todo, pero sin encharcarlo. Además, al regar no es conveniente mojar las flores ni las hojas, por lo que el método de riego más adecuado es el de inmersión, que consiste en poner la planta en un cuenco o plato con agua que no esté muy fría, dejándolas unos 15 minutos.

Como conseguir que florezca de nuevo:

Poda

Normalmente a finales de enero, la planta se habrá quedado sin hojas siendo el mejor momento para realizar la poda. Para ello, ha de cortarse los tallos dejándolos unos 10 cm de largo, siendo recomendable utilizar guantes ya que la savia, conocida como látex, es irritante para piel…Tras el corte es importante sellar la herida con cera de una vela derretida o con un mechero.

Reposo invernal

Hasta la llegada de la primavera es mejor ubicar la planta lejos de la calefacción, aunque seguirá siendo necesario el riego aunque de forma más espaciada.

Trasplante primaveral

Con la llegada de la primavera podemos trasplantarla a una maceta mayor, renovando la tierra.

La planta empezará a desarrollarse y es aconsejable aportarle un abono.

Para que la planta de Navidad vuelva a florecer en diciembre, es necesario que desde finales de septiembre o principios de octubre, pasen en 12 y 14 horas al día en la oscuridad total.

Para ello, basta con tapar la planta durante la tarde-noche con un plástico oscuro, con un cartón grueso o con una campana protectora recubierta de papel de aluminio.

El muerdago

Lleno de Leyendas…

La tradición dice que se tiene que regalar y colocarla cerca de la puerta.El día 13 de diciembre “Santa Lucía” se debe quemar el viejo muerdago que habrá absorbido las malas energías y colocar el nuevo para que nos proteja durante el nuevo año.

El muérdago crece sobre las ramas de otros árboles. El mecanismo de reproducción del muérdago es muy interesante, sus semillas son más bien pegajosas, cuando algún ave se posa sobre ella se queda adherido a su pico o a sus plumas y, una vez estas se posan en otro árbol, allí germina la simiente.

Aunque para nosotros es tóxico, es el alimento de algunos animales.

Sin duda el muérdago juega un rol fundamental en los ecosistemas a los cuales pertenece, pues sirve de alimento a aves e insectos que comparten su hábitat. Al mismo tiempo, les sirve de abrigo y hogar para construir sus nidos y madrigueras.

Dicen que es un mito escandinavo que se remonta al siglo XVII. El muérdago era sagrado para los druidas y lo consideraban mágico porque permanecía verde todo el año.También porque la consideraban única ya que sus raíces no tocan nunca la tierra.

Sea por lo que sea, las Poinsentias y el muerdago inundarán un año más los hogares de muchos de nosotros y seguirán creando ilusiones. Al fin y al cabo creer en leyendas, siempre que sean positivas, es algo bonito.

Patricia Pilar Pérez Ejarque